A apenas 13 kilómetros de Valderrobres, Fuentespalda se presenta como un auténtico refugio de paz y tradición en medio de extensos bancales de olivos y un entorno rural que ha sabido conservar su esencia con esmero. Este pintoresco pueblo destaca por su arquitectura tradicional, que incluye casas de piedra bien preservadas y calles empedradas que invitan a un paseo pausado, ideal para quienes buscan desconectar y disfrutar de la serenidad del Matarraña.

El centro de Fuentespalda es su Plaza Mayor, un espacio cargado de historia y vida local, donde destaca un antiguo pozo central que rememora tiempos pasados y que sigue siendo punto de encuentro para vecinos y visitantes. Muy cerca, la iglesia de El Salvador, con su sobriedad y elegancia, aporta un toque arquitectónico que refleja las raíces culturales y religiosas del municipio.

Uno de los grandes atractivos de Fuentespalda es el Mirador de la Punta Molinera, desde donde se pueden contemplar vistas panorámicas impresionantes del valle del Matarraña y sus montañas circundantes. Este mirador se convierte en un lugar mágico al amanecer y al atardecer, cuando la luz juega con los tonos dorados y rojizos del paisaje, regalando momentos inolvidables para los amantes de la fotografía y la naturaleza.

Para los que disfrutan de rutas y senderos, la caminata hacia la Ermita de San Miguel es una excursión que une naturaleza, historia y tradición. En esta ermita se conserva un horno medieval que todavía se utiliza durante las festividades locales, un claro ejemplo de cómo Fuentespalda mantiene vivas sus costumbres y patrimonio cultural. Participar o presenciar estos eventos es sumergirse en el alma auténtica del pueblo.

Además, Fuentespalda ofrece la posibilidad de llevarse a casa un pedacito de su tradición a través de sus productos locales. En pequeños comercios y mercados, se pueden adquirir mermeladas artesanales, aceites de oliva virgen extra de la comarca y embutidos elaborados con métodos tradicionales, ideales para degustar o regalar y prolongar la experiencia más allá de la visita.

Esta escapada es perfecta para quienes buscan autenticidad, tranquilidad y un contacto real con las raíces del Matarraña, todo ello sin alejarse demasiado de Valderrobres.

¿Cómo llegar? A tan solo 15 minutos por la A-1414 desde Valderrobres, Fuentespalda es una opción ideal para una escapada breve, auténtica y sin prisas.