Las fuertes tormentas y el granizo provocan incidencias en varios puntos del Bajo Aragón Histórico

La torrencialidad de las precipitaciones ha afectado algunas carreteras como la A-224 entre Híjar y Samper y el granizo ha impedido la circulación por la carretera entre Ráfales y la N-232 hasta las 17.00

Tras varios meses sin apenas precipitaciones, la lluvia, en muchos casos acompañada de células convectivas, ha provocado diferentes incidencias en varios puntos del Bajo Aragón Histórico. La A-224, en el punto kilométrico 10 y término municipal de Híjar, ha tenido que ser cortada al tráfico debido al agua acumulada que ha caído por el barranco de la zona, tal y como confirman fuentes del Centro de Emergencias 112. «No es la primera vez que pasa. El agua se acumula y arranca el asfalto de la carretera y hasta que el agua no pierde fuerza no se puede volver a circular», señala el alcalde de Híjar Jesús Puyol.

El concejal de Samper de Calanda, Fidel Falo, apunta que la afección «ha sido bastante grave porque ha vuelto a inundarse y a salirse la carretera en el punto en el que la estaban reparando por la tormenta del año pasado». El nivel del agua ya ha ido bajando pero la corriente ha arrastrado barro y piedras, lo que la hace «intransitable».

El corte al tráfico se ha producido en torno a las 16.00, tras el aviso de la Guardia Civil. Hasta la zona afectada se han desplazado voluntarios de Protección Civil y se ha movilizado al parque de Carreteras de la DGA. La carretera permanecerá cerrada hasta mañana y, en estos momentos, los pasos alternativos al tráfico desde la localidad de Híjar son la A-1406 y las TE-V-7001, por la Puebla de Híjar y por Jatiel, respectivamente. 

Por otro lado, el 112 ha recibido varias llamadas por acumulación de agua en la N-232, en el kilómetro 182, término municipal de Azaila y a 11 kilómetros de Híjar. Hasta allí, se han desplazado voluntarios de protección civil del Bajo Martín y, de momento, no está cerrada al tráfico.

Además de lluvia, también ha habido zonas en las que el granizo ha caído con fuerza como en Muniesa y también en el Matarraña, en municipios como Ráfales, Fórnoles y La Portellada. «Ha empezado a caer una tromba de agua muy grande y con mucho granizo. Hemos tenido que llamar a la Guardia Civil para cortar la carretera que va de Ráfales a la N-232″, explica su alcalde José Ramón Arrufat. Debido al hielo del granizo, también ha tenido que intervenir el Servicio de Vías y Obras de la Diputación de Teruel (DPT) para limpiar esta carretera (la TE-V3005). La carretera se ha abierto al tráfico sobre las 17.00. Además, los operarios de la DPT han actuado en la TE-V3001 a Torre del Compte por pequeños desprendimientos.

Noticia de : La Comarca